REFLEXIÓN 7: La transversalidad de la envidia

REFLEXIÓN 7: SOBRE LA TRANSVERSALIDAD DE LA ENVIDIA

Ciertamente hay mucha gente que piensa que no existe la envidia hacia los grandes clásicos, nuestros referentes. La envidia parece más una cuestión de la imposibilidad del alcance hacia la otredad próxima. Como ese afán de competencia hacia quienes son capaces de realizar cosas fuera de las posibilidades de las que uno es consciente. Parece más fácil admirar a quien domine una disciplina ajena que a la propia. Pero esta pregunta que dice ¿a qué artista clásico envidia Vd. realmente? es difícil de contestar porque significa sacar de contexto esta cuestión de desear lo que uno no tiene ni tendrá en un espacio y tiempo diferentes. Casi como desligarnos de nuestra condición de piezas del puzzle de la cultura general. Casi incluso una pregunta sin sentido. Sin embargo, creo que existe.

Lo estuve pensando mucho, y creo que esa respuesta es algo más que unas palabras, por la consecuencia de despojarse de la época en que vivimos. Porque en realidad, somos nosotros mismos quienes elegimos a los hijos ilustres de otras épocas, revalorizando o ninguneando a los aludidos. A veces se ponen de moda unos y a veces otros. Cuando estudiaba Bachillerato, todo el mundo leía la poesía de Bécquer. Ahora parece que casi nadie lo hace y apuestan más por Campoamor, por ejemplo. También he conocido gente que prefiere a Manuel Machado antes que a su ilustre hermano Antonio. No voy a entrar en el debate de quién me parece mejor poeta porque entro en el farragoso terreno de los gustos.

Pero sí envidio a ciertos grandes clásicos, pintores y poetas, incluso más que a mis compañeros de viaje. Son pocos, poquísimos, ¿quién soy yo para atreverme a esta vanidad que no me pertenece? Tan don nadie e insignificante como soy y tiene la suerte de poder hacer lo que le gusta. ¡Quién sabe si de algo me servirá esto si lo importante es no dejar de aprender! Con eso me vale y basta.

¿Y qué tal una antología de poetas y artistas de los miles que somos donde cada uno declare a quiénes envidian del remoto pasado? Seguro que los resultados serán sorprendentes.

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